Demostrando sus cualidades a la hora de galopar, Kung Fu Mambo, defensor del stud Doña Licha,  ocupó el primer lugar al derrotar por 5 ¾ cuerpos a Pepe Trueno y se llevó el Derby Nacional del presente año.

Reportera: Valeria Fuertes. Fotografía: Martín Alejandro.

Ni Babieca, ni Rocinante. Ellos son purasangres que deleitaron pupilas ajenas tras una histórica jornada con elegancia, agilidad y belleza que se combinan como el mejor plato en Mistura para goce y placer de quienes los vieron galopar.

El Derby Nacional es la prueba máxima del turf peruano, que todo propietario, criador y jockey desea ganar.Se disputa en el Perú desde 1903. El último domingo, el Hipódromo de Monterrico desempolvó  su mejor investidura para recibir a los potrillos que se preparan durante todo el año y, con ellos, a la afición hípica peruana que no deja de acompañar ni apostar por su mejor equino.

Una pista de arena y una distancia de 2400 metros recibirían a once potrillos que se disputarían  la tercera corona de las cuatro que conforman la Cuádruple Corona Peruana.

Antes de comenzar la carrera, los aficionados se acercaban a las cajas para hacer las respectivas apuestas y, con ojo de buen conocedor, darle a su favorito. ¿Su favorito? Mentira. Los caballos que corren son aquellos que han tenido un buen despliegue y un entrenamiento arduo durante todo el año. Aunque el azar husmea sigilosamente las mentes de quienes saben.

El público expectante por el desenlace de un gran espectáculo que nos dejó este Derby Nacional.

Suena la campana de inicio. La multitud se paralizó, mientras los periodistas narraban segundo a segundo lo que acaecía en esa pista que más adelante se convertiría en el mejor escenario para el ganador de La Cinta Azul. Good Luck Keny (Arg) estuvo imponiendo toda su majestuosidad durante la mitad de la carrera. Las voces desesperadas no cesaban de gritar: “’Vamo’ Kung Fu Mambo” con el característico sonido de los dedos. La Colosa no tuvo más remedio que aceptar la superioridad de los machos. ¿Y el Elbchaussee de Paolo Guerrero? Ni sus herraduras, pero nada mal porque de los 6 caballos en su haber, uno de ellos ya le regaló un primer puesto en el clásico “Presidente de la República” la semana pasada.

A 600 metros del final, en la curva que corta respiraciones, un triunfo incuestionable fue el que se llevó el argentino Kung Fu Mambo, debido a que nadie fue a ponerle caballo y la línea estuvo inclinada, el jinete Carlos Javier Herrera no se hizo problemas para adelantarse con toda confianza. Eso fue suficiente para que dominara y posteriormente se separara en los finales. Pepe Trueno llegó segundo en el último salto sobre Good Luck Keny, mientras La Colosa fue cuarta. Mr. Bond, Teahupoo, Elbchaussee, White Spirit, Pinturero, El Chilimoya y The Kraken llegaron luego.

Celebración y euforia por la victoria. El jinete de Kung Fu Mambo declarando para la cadena internacional ESPN.

Así es, Kung fu Mambo, con dos trofeos (un clásico) y tres figuraciones acumulados, puede convertirse en un excelente semental, porque después de lo ocurrido en el clásico Robalca y el Derby, pura sangre como este no se escapa tan fácilmente del lente de un aficionado.